Las demandas por el reconocimiento constitucional de los pueblos indígenas han tenido eco en las discusiones sobre un nuevo marco constitucional para Chile, lo que ha abierto la discusión al reconocimiento de los sistemas jurídicos indígenas abandonando la tradición monista imperante. El reconocimiento del pluralismo jurídico supone una tarea compleja de adecuación de las instituciones del sistema no indígena. Las experiencias de otros países latinoamericanos pueden resultar provechosas para la identificación de los principales nudos problemáticos que deben ser considerados para la coexistencia de diversos sistemas jurídicos. El reconocimiento de los sistemas normativos indígenas propios implica reforzar los compromisos estatales en materia de acceso a la justicia no indígena de los pueblos indígenas, en tanto supone la incorporación de la perspectiva intercultural en el ejercicio de la función jurisdiccional. Con el fin de aportar a estas discusiones, se presentan algunas reflexiones comparadas y los elementos imprescindibles para el proceso legislativo que su reconocimiento constitucional implica.